Dictaduras como la de Nicaragua, controlada por Daniel Ortega, aliado del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, suelen utilizar expresiones que pretenden transmitir un “aire” de naturalidad al régimen, incluso cuando éste prohíbe celebraciones históricas practicadas por cristianos. como es el caso de la Semana Santa.
Según información de The Christian Post, este año Nicaragua también prohibió las procesiones católicas durante la Semana Santa. En su lugar, el gobierno decidió realizar “procesiones populares”.
Sin embargo, no hay absolutamente nada de “popular” en la iniciativa del gobierno, ya que la decisión de la dictadura va en contra de la libertad religiosa. Ortega sabe que no corresponde al Estado decidir realizar “procesiones”, pero su deseo de controlar la influencia de los cristianos en el país es mayor que el respeto a los derechos civiles.
“Odio a la Iglesia”
La noticia sobre la prohibición de procesiones durante la Semana Santa en Nicaragua también fue reportada por International Christian Concern (ICC), una organización internacional de vigilancia religiosa.
La CPI informó que la denuncia provino de la abogada opositora Martha Patricia Molina. Según ella, Ortega prohibió 4.800 procesiones durante el período de celebración de la Pascua cristiana.
Al igual que los católicos, los evangélicos en Nicaragua también han sufrido una persecución sistémica, practicada mediante el cierre de instituciones vinculadas a las iglesias, así como la censura contra líderes influyentes del país.
Desde 2018, cuando las iglesias abrieron sus puertas para recoger a las víctimas de una masacre perpetrada por las fuerzas de seguridad de Ortega, durante unas protestas contra su régimen que se saldaron con la muerte de al menos 440 personas , los cristianos han sido perseguidos sistemáticamente en el país.
En un verdadero arrebato, Molida dijo que Nicaragua vive como una “dictadura criminal que no cesa su odio contra la Iglesia católica ni siquiera durante la Cuaresma”.
“Si es peligroso rezar el rosario en la calle, es excesivamente peligroso denunciar agresiones. Muchos sacerdotes creen que si presentan denuncias habrá más represalias contra las comunidades. A nosotros como laicos nos gustaría que hablaran, pero las únicas alternativas son el cementerio, la cárcel o el exilio”, concluyó.
fuente https://noticias.gospelmais.com.br/nicaragua-substitui-igrejas-semana-santa-procissoes-populares-168351.html