La comunidad cristiana en México lamenta el asesinato del líder cristiano y activista indígena Marcelo Pérez. Fue asesinado a tiros el 20 de octubre en San Cristóbal de las Casas, en el estado de Chiapas. Una investigación de Puertas Abiertas documentó un aumento del 128% en incidentes relacionados con el crimen organizado en el país
Pérez fue asesinado por dos hombres en motocicleta en una de las regiones más pobres y violentas del país. Era conocido por mediar en conflictos sociales y luchar contra la injusticia, especialmente hacia los más vulnerables. Su ejecución pone en evidencia la crisis de violencia causada por la dominación del crimen organizado, que elimina a quienes desafían sus actividades ilegales.
En los últimos meses, Pérez condenó públicamente la creciente violencia en Chiapas. En septiembre, durante una marcha contra la violencia, advirtió que el estado era una “bomba de tiempo”. Durante una entrevista, el líder cristiano afirmó: “En Simojovel, pusieron precio a mi cabeza”.
A pesar de las amenazas, Pérez continuó su misión de luchar contra la violencia y la injusticia. En 2015, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió medidas cautelares para su protección, pidiendo al gobierno mexicano que protegiera su vida.
Violencia en México
El asesinato del líder cristiano destaca la falta de protección del gobierno mexicano para aquellos que luchan por justicia y paz en áreas dominadas por el crimen organizado. En los primeros ocho meses de este año, casi 500 homicidios fueron registrados en Chiapas, un aumento en comparación con los 309 asesinatos registrados en el mismo período de 2023. Pérez denunció esta violencia y el desplazamiento generalizado de la población, además de secuestros de civiles.
Algunas organizaciones internacionales condenaron el asesinato, subrayando que la muerte de Pérez no solo es una pérdida para la comunidad cristiana, sino también un revés para los esfuerzos de paz en Chiapas. Según Jorge Jiménez, investigador de Puertas Abiertas, los grupos criminales ven a líderes y activistas cristianos como amenazas a sus intereses económicos y sociales.
“Es importante notar que los cárteles mexicanos y las redes criminales no atacan a la iglesia porque son cristianos, sino porque ven el trabajo de sacerdotes, pastores, misioneros y organizaciones asociadas como una amenaza a sus intereses socioeconómicos. Si alguna actividad ministerial interrumpe sus operaciones, inmediatamente ven al cristiano como un enemigo a eliminar”, explica Jiménez.
Peticiones de oración
Intercede por consuelo y sanación para los familiares y amigos de Marcelo Pérez.
Clama por paz y el fin de la acción del crimen organizado en México.
Ora por sabiduría y discernimiento para los gobernantes, para frenar la violencia y la acción de los cárteles de drogas.
fuente https://puertasabiertasal.org/cristianos-perseguidos-noticias/lider-cristiano-es-asesinado-en-mexico