A la edad de 15 años, Sarie Audu encontró esperanza en la música gospel después de que extremistas islámicos fulani mataran a su padre.
Audu, el segundo de cinco hermanos, creció en un hogar lleno de amor en la aldea de Nzharuvo, en el estado de Plateau, Nigeria, a unos 35 kilómetros de la capital del estado, Jos. Este ambiente acogedor le inculcó los valores de la fe y la perseverancia, que más tarde lo ayudarían a transformar su dolor en canciones alentadoras.
Su padre, Bulus Mangwa, era un granjero trabajador, albañil y miembro devoto de la Iglesia Evangélica Ganando a Todos (ECWA). Era un talentoso compositor de canciones gospel y utilizó su música para difundir mensajes de fe y esperanza. Trágicamente, el 25 de mayo de 2021, Mangwa y otras tres personas sufrieron una emboscada cuando regresaban de un funeral y fueron brutalmente asesinados.
“Todavía recuerdo ese día como si fuera ayer”, compartió Audu con la voz cargada de emoción. “Era mi cumpleaños. Mi padre estaba cansado, pero se fue a trabajar en la granja. Horas después, recibimos la devastadora noticia”.
Ese mismo día, otras 27 personas murieron en una serie de ataques en todo el estado de Northern Plateau. Esta violencia, que forma parte de los ataques constantes contra los cristianos, ha dejado en apuros a comunidades como la de Audu.
Tras la muerte de su padre, la familia de Audu se enfrentó a enormes desafíos. Sin fondos para continuar su educación, Audu y sus hermanos se vieron obligados a abandonar la escuela. En esa época, Audu encontró fuerza en las enseñanzas de su padre.
“Me enseñó a escribir canciones y me dijo que la música puede sanar el corazón”, recordó Audu. “Una de sus canciones, 'God Will Wipe Our Tears', me ayudó a superar los momentos difíciles. Me recuerda que, incluso en medio de la pérdida, Dios nos da esperanza de un futuro mejor”.
Inspirado por el legado de su padre, Audu comenzó a usar la música no solo como una válvula de escape personal, sino como una forma de animar a los demás. “Mis canciones empoderan a los creyentes, especialmente a los que están de duelo”, dijo. “Quiero difundir esperanza a través de mi música y llegar a personas de todo el mundo”.
La determinación de Audu llamó la atención de The Blessing Projects, una organización religiosa que lo apoyó para continuar con su educación. Ahora, como estudiante de la escuela secundaria anglicana Crowther, Audu está reavivando sus sueños y expandiendo su ministerio a través de la música.
A pesar de su resiliencia, Audu sigue hablando abiertamente de los desafíos que enfrenta su comunidad. “Necesitamos una mayor seguridad en Miango”, instó. “El gobierno no ha sabido protegernos. Muchas familias han perdido a sus seres queridos, sus hogares y sus medios de vida. Es necesario abordar el pastoreo al aire libre para evitar una mayor destrucción de las tierras agrícolas”.
Aun así, Audu mantiene la esperanza. “Dios es el juez supremo. Rezo para que los responsables de estos actos terribles rindan cuentas”, afirmó.
Mientras continúa con su educación y su ministerio musical, Audu se aferra a las palabras de su padre: "Hay un mañana mejor, sin importar las circunstancias".
“La vida de mi padre me inspira a ser fuerte”, dijo Audu. “Quiero ser tan valiente y trabajadora como él, y tal vez lograr cosas aún más grandes. Con Dios, podemos superar cualquier cosa”.
fuente https://www.persecution.org/2025/01/02/faith-amid-tragedy-nigerian-teen-transforms-grief-into-gospel-hope/