En un valle, rodeado por dos imponentes montañas, de un lado, voces proclaman bendiciones; del otro, resuenan maldiciones. Parece un impactante escenario dramático, pero así fue la poderosa ceremonia que Dios ordenó para Israel entre los montes Gerizim y Ebal (Deuteronomio 27). En un mundo cada vez más confundido, esta historia ofrece una figura sorprendente y necesaria para determinar nuestro enfoque en la vida cristiana. Esta ceremonia nos brinda un modelo crucial para la vida del creyente y las misiones. Invita a proclamar tanto la gracia como el juicio, a reconocer la realidad del juicio divino al tiempo que escogemos sabiamente las consecuencias eternas.
La realidad de las consecuencias: Deuteronomio 11:26-28 presenta claramente que hay consecuencias para nuestras elecciones, bendición por la obediencia y maldición por la desobediencia. Cuando proclamamos a Cristo, debemos recordar que el evangelio es la mejor noticia para la humanidad, al mismo tiempo que ofrece una advertencia seria. La historia de Jonás ilustra este principio. Dios envió a Jonás a Nínive no solo con un mensaje de juicio inminente, sino también con la posibilidad implícita de misericordia si se arrepentían. La respuesta de Nínive demuestra que cuando las personas comprenden las consecuencias de sus acciones, pueden ser movidas al arrepentimiento y la transformación (Jonás 3).
La importancia de la elección: La ceremonia en Gerizim y Ebal enfatiza la realidad de la libertad de elección humana. Deuteronomio 30:19 lo expresa: “He puesto delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida...”. Nuestro mensaje debe presentar el evangelio de una manera que respete la capacidad de elección de las personas. Josué ejemplificó esto cuando desafió a Israel: “Escogeos hoy a quién sirváis” (Josué 24:15). Su llamado a una decisión clara y personal resuena con la urgencia que deben tener nuestros esfuerzos misioneros en un mundo que ofrece tantos caminos de maldad y confusión.
La necesidad de claridad: La disposición física de la ceremonia, con bendiciones proclamadas desde un monte y maldiciones desde otro, subraya la importancia de la claridad en nuestro mensaje. En un mundo de relativismo moral, nuestro mensaje debe presentar el evangelio con una distinción clara entre la verdad y el error. El ministerio de Pablo en Atenas (Hechos 17) demuestra cómo podemos comunicar que Jesús es la verdad en un contexto pluralista. El apóstol Pablo presentó el mensaje de manera que su audiencia pudiera entenderlo, con un llamado claro al arrepentimiento.
El equilibrio entre gracia y verdad: La presencia tanto de bendiciones como de maldiciones nos recuerda que debemos proclamar la gracia de Dios sin descuidar las demandas de Su santidad. Nuestras misiones deben reflejar este equilibrio, ofreciendo esperanza sin comprometer la verdad.
Jesús mismo modeló este equilibrio perfectamente. En Juan 8, en el incidente de la mujer sorprendida en adulterio, Jesús demostró gracia al no condenarla, pero también verdad al instruirle que dejara su vida de pecado.
La ceremonia de Gerizim y Ebal nos desafía a proclamar un mensaje claro y completo, que reconozca tanto la gracia como el juicio de Dios, y que encamine a las personas a tomar decisiones con entendimiento de las consecuencias eternas. La historia de Elías en el Monte Carmelo (1 Reyes 18) nos puede ayudar a recordar este principio. Elías confrontó a una nación dividida con una elección clara entre Dios y Baal. Su desafío seguido de la demostración del poder de Dios, llevó al pueblo a una decisión inequívoca. De manera similar, nuestro mensaje debe buscar crear estos momentos de claridad y decisión.
Como seguidores de Cristo y llamados a predicar el mensaje, debemos examinar críticamente nuestra vida diaria y métodos. ¿Estamos escogiendo el camino de bendición? ¿Estamos presentando el evangelio completo, con sus bendiciones y advertencias? ¿Estamos respetando la capacidad de elección de las personas mientras las urgimos a elegir sabiamente?
Hoy quiero invitarte a renovar tu compromiso con una misión que refleje las lecciones de Gerizim y Ebal. Que nuestras enseñanzas no solo ofrezcan consuelo, sino que también desafíen; que no solo prometan bendiciones, que también adviertan sobre las consecuencias del rechazo a Dios. Recordemos Deuteronomio 30:19-20: “...escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días…”. En un mundo lleno de opciones que conducen a la muerte, para nosotros mismos tomemos la vida y guiemos a otros en ese camino. En un paisaje espiritual tan dividido como el valle entre Gerizim y Ebal, que nuestro mensaje sea claro dirigiendo a las personas hacia la bendición de Dios y la vida eterna.
--
Esta serie semanal titulada Su bendita Palabra me impulsa está diseñada para descubrir que el plan de Dios para ti es evidente desde el Génesis hasta el Apocalipsis.
Angel Guerrero.
Ministerio Palabra Viva.
Tema 17, lunes 05 de agosto, 2024.
avivapalabra@gmail.com
+51938256756
Si has sido bendecido por esta palabra, puedes orar con nosotros de manera constante. Comunícate por WhatsApp al número +51938256756 o escribe al correo avivapalabra@gmail.com y solicita la guía de oración mensual.
Si tienes el deseo de predicar la palabra de Dios y no sabes cómo empezar. Si sientes un llamado y no sabes cómo canalizarlo. Puedes escribir por WhatsApp al número +51938256756 o al correo avivapalabra@gmail.com y solicitar orientación.
Si deseas leer los temas publicados de esta serie semanal puedes seguir este link:
https://www.elmensajerodelapaz.net.pe/category/palabra-viva-angel-guerrero/